El libro de poesías

Ayer encontré un libro antiguo de papá. Al principio no me di cuenta que lo había adquirido en la biblioteca del pueblo. Lo habían donado y estaba bastante deteriorado, poesía española, primera edición… no doy pistas porque lo tengo a mi lado.

 

Creo que ya nadie lo echará de menos por el tiempo pasado y además para mi sorpresa, cuando lo tomé entre mis manos, entre sus páginas, había una pequeña hoja de cuaderno dentro de una de sus páginas dónde ponía mi nombre.

 

Me dio un vuelco el corazón y sentí ¡Aquí estoy papá!

Entonces cerré los ojos para volver a sus brazos, a esas manos inconfundibles de pianista y oír su cálida voz.

¡Te necesito tanto! Y me llenó de besos y abrazos de osos, esos abrazos que son inconfundibles e incomparables como una y otra vez sentimos.

 

Me dispuse a leer sus palabras y el mundo me pareció aún más bello, en blanco y negro, en color…

Cómo no reconocer sus letras a través de unos trazos que desprendían tanta sensibilidad, un mensaje dónde cada una de las palabras expresan un valor espiritual y humano.

Entonces vuelves a sentir que puedes volar y flotar.

 

Gracias papá, te quiero y cada día me enseñas una nueva lección de vida, tu precioso regalo del alma como niña y como tu hija, una realidad que me hace seguir y más hoy y mañana, un presente y un futuro que ofrecer.

 

Todos nosotros tenemos a maravillosas personas que forman parte de ese libro de poesías.

Leave a Reply

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *