Como decirte cuanto te quiero,
fuiste el último en llegar con el amor del primero.
Mi dulce hermano de gran sentimiento,
ojos vivarachos que expresan momentos.
Creciste y creciste por fuera y por dentro.
¡Qué orgullo de hermano! ¡Y cuanto te quiero!
Cuanto añoro, aquellos momentos,
te cogía en mis brazos,
te miraba en silencio
y tus gestos envolvían el más bello sentimiento.
Y en padre te convertiste,
con tu ternura infinita.
Espíritu grande de amor y esperanza,
pequeño tesoro con alas de oro.
Corazón de seda, canciones de cuna
que hablan y llaman buscando a la luna.
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